Dos fastuosos carruajes
Si hace apenas unos meses los funerales de la Reina Isabel II de Inglaterra fueron un acontecimiento de atención mundial, este sábado 6 de mayo la historia se volverá a repetir, esta vez para celebrar la ceremonia de coronación de su heredero de la dinastía Windsor, Carlos III.
Diamond Jubilee State Coach: la carroza más moderna
Londres volvio a reunir las miradas de cientos de millones de personas para una ceremonia que hace 70 años que no se celebraba. Y como nosotros tenemos nuestra atención puesta en los vehículos que se utilizaron allí, lo primero que tenemos que contar es que Carlos y Camilla de Inglaterra innovaron: por primera vez en una coronación se utilizo la Diamond Jubilee State Coach.
En la mañana del 6 de mayo, Sus Majestades recorrieron un trayecto de 2,1 kilómetros entre el Palacio de Buckingham y la Abadía de Westminster (en la denominada King’s Procession), donde se celebro la ceremonia, a bordo del carruaje creado hace ahora 11 años, en 2014, para celebrar el 50 aniversario del reinado de Isabel II.
La Diamond Jubilee State Coach es la más moderna de las carrozas reales, construida en aluminio y con lujos como un sistema de suspensión, ventanillas eléctricas y hasta aire acondicionado.
La Gold State Coach, una auténtica joya
Desde 1762 y hasta 2022, el vehículo utilizado por los diferentes reyes y reinas de la dinastía Windsor ha sido la Gold State Coach, un fastuoso carruaje de madera maciza, del que tiran ocho caballos elegidos específicamente para esa labor: los Windsor Grey Horses, caballos con una presencia y una fuerza especial ya que el peso del carruaje es de nada menos que cuatro toneladas.
El primer monarca en utilizar el que hoy día es el segundo carruaje más antiguo del pais fue Jorge III, en 1762 con motivo de la inauguración del Parlamento Británico. Desde la coronación de Guillermo IV en 1831 se ha empleado en todas las ceremonias de entronización de los reyes ingleses.
La Gold State Coach fue el vehículo en el que Isabel II acudió a su ceremonia de conoración (el 2 de junio de 1953) y también se empleó mucho más recientemente en otro acto muy simbólico: sus bodas de platino, que conmemoraba sus 70 años en el trono.
Cuatro toneladas y muy incómoda
Pese a que su ornamental presencia es imponente, no es un vehículo cómodo (carece de cualquier tipo de suspensión) y de difícil acceso (los ocupantes van sentados a la altura de la cabeza de la escolta externa, por ejemplo. De hecho, la propia Isabel II recordó su paseo en ella (que fue de 8 km.) como algo «horrible» en algunos documentales recientes.
Ahora es el turno de los nuevos monarcas, Carlos III y la Reina Consorte Camilla, ya que hicieron en ella trayecto de vuelta desde la Abadía de Westminster hasta el palacio de Buckingham, ya coronados como Reyes de Inglaterra. De este modo se mantendrá la tradición de usar este vehículo y se limitarán las dificultades que supone su uso.
El desfile que entronizará a Carlos III está llamado a ser la parada militar ceremonial más numerosa en los últimos 70 años en Reino Unido.
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