El gato trasero tocó el Aston Martin del asturiano mientras cumplía sanción pero lo vieron mal y tarde y le reinstauraron el podio 100 porque «no hay un acuerdo claro en que tocar con el gato es trabajar en el coche».

Un podio de ida y vuelta, logrado al acabar la carrera, perdido pocos minutos después, y resintaurado en la madrugada árabe. Así ha sido el podio 100 de Alonso, como es él, único e intransferible.

Fernando Alonso fue sancionado con diez segundos, tras la conclusión del Gran Premio de Arabia Saudí por no cumplir bien los cinco segundos de sanción en el pit-stop. El asturiano había terminado la carrera en cuarta posición, mientras que George Russell ha sido el afortunado al ocupar la tercera posición por los errores del asturiano y del equipo verde.

Los comisarios han decidido que Aston Martin empezó a trabajar en el coche de Alonso una fracción de segundo antes de tiempo y le han impuesto una penalización de tiempo. Uno de los mecánicos del equipo con sede en Silverstone tocó el AMR23 de Alonso con el gato durante los cinco segundos de sanción, algo terminamente prohibido por el reglamento.

Llegó a subir al podio

Recordemos que la sanción se dobla. La primera ha sido debido a que se colocó mal en la caja de la parrilla de salida. Y a la postre eso le ha perjudicado notablemente, ya que su actuación ha sido impecable. Sólo han podido con él los dos Red Bull (Checo Pérez y Max Verstappen). Lo triste es que Alonso ha llegado a subir al podio para celebrar su centenario.

Este es el segundo fin de semana consecutivo en el que se produce un caso como este. En Bahréin le sucedió a Esteban Ocon lo mismo que a Alonso. Pero en este caso ha sido más sangrante el asunto porque lo de Fernando ha ocurrido cuando quedaban muchas vueltas por delante. Ha finalizado la carrera y ya después de haberse subido al podio, el ’14’ se ha enterado que se quedaba sin tercer puesto. Es un claro caso de mala actuación de la FIA por la lentitud de la decisión, no por el castigo en sí que está bien aplicado según se contempla en el reglamento deportivo. Mercedes ha reclamado y la jugada le ha salido bien.

En concreto, el organismo rector ha actuado en contra de los intereses de Alonso y Aston Martin en virtud del 54.4c, que reza así: «Mientras un coche esté parado en el ‘pit lane’ como resultado de haber incurrido en una penalización de acuerdo con con los artículos 54.3a) o 54.3b), no se podrá trabajar hasta que el coche se quede totalmente parado mientras dure la penalización» .

Sin embargo, y tras varias charlas posteriores de miembros del equipo verde en el cuarto de los comisarios, éstos que admitieron no ver en directo la falta del equipo y tardar media carrera en sancionar (ni tampoco el garaje remoto en Suiza que tienen de apoyo), que admitieron reabrir el caso por que en la última vuelta alguien presentó nuevas evidencias (Mercedes) con las que sancionaron a Alonso, al final primero aceptaron a trámite revisar la sanción y luego decidieron que «llegamos a la conclusión de que no había un acuerdo claro que podría ser invocado para determinar que las partes habían acordado que un gato tocando un coche equivaldría a trabajar en el coche, sin más». Vamos, que no está negro sobre blanco en concreto este hecho.

Curiosamente minutos antes en la sanción decían que incluso podrían haber descalificado el coche, pero que el toque del gato no era los suficientemente decisivo como para llevarlo a cabo. Y de ahí saltaron a al decisión opuesta. «Dadas las circunstancias, consideramos que nuestra decisión original de imponer una sanción al Auto 14 necesitaba ser invertido y lo hicimos en consecuencia», cierran la sanción con la que devuelven el podio 100 al español.

Alonso, dolido con la decisión de la FIA y satisfecho poco después

«La FIA ha tardado demasiado en tomar esta decisión. Han tenido más de 30 vueltas para pensar en la penalización. Si me lo hubiesen dicho durante la carrera, habría tirado más. Y podría haber sacado más tiempo a Russell», soltaba Fernando (al final superó al de Mercedes por un poquito más de cinco segundos) sin saber que se le repondría. «Que me quiten lo bailao, porque me he subido al podio. Pero lo cierto es que la FIA lo ha hecho todo un poco mal«, sentenciaba.

Al final de la noche celebraba con sus fans el podio por todo lo alto en sus redes sociales.

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